Hatillo (objeto)
Un hatillo, hato o linyera[1] es un paquete de ropa o pequeños enseres envuelto en un pañuelo o trapo. Se puede considerar un símbolo representativo de campesinos de baja extracción social, vagabundos o marginados sin hogar.
_p051_Fig.25-27.jpg.webp)

Hoy en desuso, era bastante habitual entre los viajeros con pocas posibilidades económicas. La representación de los vagabundos en la cultura popular es muy extensa en la literatura, los cómics o el cine. Si bien el hatillo se representa en algunas ocasiones atado al final de un palo, también puede transportarse atado al cuerpo.

Etimología
Hatillo es el diminutivo de hato,[2] palabra que procede del gótico fata (vestido) y esta, a su vez, del nórdico fot.[3]
Las expresiones "tomar el hatillo" y "coger el hatillo", recogidas por el Diccionario de la lengua española, significan "irse"[4] y equivalen a iniciar un viaje. "Liar el hato" es marcharse; "tirar el hatillo al mar" significa enojarse; "andar con el hato a cuestas" es vagabundear o cambiar a menudo de domicilio.
Historia
Los hatillos hechos con pieles de animales fueron la más antigua forma de equipaje; así era fácil meter y sacar cosas que el viajero necesitara.[5]
Hatillo en la cultura popular
El personaje del vagabundo se ha representado a menudo portando un hatillo, a menudo sujeto a un palo. Así, cuando Sullivan, el personaje que interpreta Joel McCrea en Los viajes de Sullivan se disfraza de vagabundo, no le falta su hatillo sujetado con un palo.[6]
Especialmente famosa es la imagen creada por Norman Rockwell y titulada The Runaway, usada como portada por The Saturday Evening Post en septiembre de 1958.[7]
En las historietas en español, los dibujantes no han dudado en añadir el hatillo a sus personajes. Así, cuando Ibáñez dibuja a su Mortadelo con el disfraz de vagabundo, no olvida este detalle.[8]
Otros personajes, como Bermudillo, el genio del hatillo hacen de este elemento parte fundamental de su atuendo.
En la literatura popular, el pícaro suele llevarlo: El Lazarillo (...hice un hatillo con las ropas del caballero y salí corriendo en dirección contraria).[9]
También Kerouac en Los vagabundos del Dharma afirma que lo usan: "Cerca de Camarillo, donde Charlie Parker se había vuelto loco y recuperado la cordura, un viejo vagabundo delgado y bajo saltó a mi furgón cuando nos dirigíamos a una vía muerta para dejar paso a otro tren, y pareció sorprendido de verme. Se instaló en el otro extremo del furgón y se tumbó frente a mí, con la cabeza apoyada en su mísero hatillo, y no dijo nada."
Referencias
- Real Academia Española. «linyera». Diccionario de la lengua española (23.ª edición).
- DRAE.
- DRAE
- DRAE
- Celdrán, Pancracio (1995). Historia de las cosas. ISBN 84-7838-681-5.
- Crítica extensa de Los viajes de Sullivan, en la que existen numerosos fotogramas y se puede ver a McCrea posando ante el espejo con el hatillo.
- The Runaway, obra de Norman Rockwell.
- Disfraces de Mortadelo, en el de vagabundo, no falta el hatillo a la espalda.
- Anónimo. Basilio Losada, ed. Lazarillo de Tormes. Rialp. p. 154.